Ahorra tiempo y no busques en internet o en los libros la posición perfecta para amamantar porque no existe una forma única, déjate llevar y fluye con tu bebé teniendo en cuenta que lo importante es que tu te sientas cómoda, que el bebé esta pegado a ti y que se agarre bien a tu pecho.
Para saber si se ha agarrado correctamente la boca del bebé ha de estar bien abierta, con los labios hacia afuera abarcando casi la totalidad de la areola y las mejillas han de notarse redondas cuando succiona.
A continuación encontrarás algunas posturas que pueden ayudarte a vivir una lactancia más cómoda, si has practicado alguna de ellas o conoces alguna otra técnica de lactancia deja tu comentario en esta entrada.
De cuna.
La más conocida. Te sitúas sentada con tu bebé en tus brazos, enfrentado y pegado a tu cuerpo para que tengo acceso a tu mama.